Todo niño define entre los 2 y los 4 años su preferencia definitiva de una mano u otra, pero ser zurdo o diestro queda prácticamente establecido a la edad de 5 o 6 años. También existe una importante relación en que un padre o una madre tengan esa costumbre y su hijo lo aprenda por imitación o porque ellos así lo han acostumbrado.
Lo más importante que un papá debe saber es que todo se define por la lateralidad, que es lo que marca la preferencia de uno de los lados de nuestro cuerpo sobre el otro, especialmente en habilidades o fuerza. La mayoría de personas tienen un lado dominante y son pocas las personas ambidiestras, es decir, que tienen una destreza mixta.
Las personas diestras tienen como dominante el hemisferio izquierdo y las personas zurdas tienen como dominante el hemisferio derecho.
Otros estudios señalan que el predominio de una u otra lateralidad es algo que se ve condicionado por los genes, por lo que existiría más posibilidades de ser zurdos si existen antecedentes familiares, porque el gen LRRTM1, es el que determina que una persona sea zurda.
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Mientras que una postura más indica que vivir estrés de nacimiento marca ser zurdo o diestro, debido a que podrían existir lesiones en un hemisferio cerebral del bebé.
De hecho, durante el embarazo o los primeros meses de vida se puede inducir que uno de ellos se desarrolle más, en el caso que sea el hemisferio izquierdo el lesionado, supuestamente la persona será zurda.