Dedos de martillo o en garra
Están flexionados como consecuencia del debilitamiento o acortamiento de los músculos o tendones. Son susceptibles a los callos, y los zapatos angostos favorecen su aparición. Esta deformidad dificulta el andar y el equilibrio; se puede corregir con el uso de almohadillas, de no ser así es necesario operarlos.
Dolor del arco o talón
Puede deberse a muchas causas entre ellas: pies planos valgos o varos. Las plantillas son necesarias para su corrección y deben ser diseñadas por un ortopedista quien toma en cuenta las particularidades de cada persona.
Dolor entre el tercer y el cuarto dedo
Es provocado por la hinchazón de algún nervio y suele aliviarse al descalzarse o usar uno suave pero también puede ser causado por un neuroma de Morton, lesión que provoca inflamación crónica y en tal caso requiere intervención quirúrgica.
Espolón
Depósito de calcio en el talón causado por una brevedad del tendón de Aquiles. Se recomiendan plantillas, ejercicios de alargamiento y dispositivos de soporte para descargar la zona de tensión.
Juanete
Protuberancia ósea en el borde externo del dedo pulgar, el cual apunta hacia el segundo. Es hereditario o provocado por zapatos puntiagudos, de tacón o apretados. Los antiinflamatorios, protectores y las plantillas producen alivio pero una cirugía es el único método eficaz para corregir la desviación y acabar con el dolor.
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Onicomicosis
Infección de un hongo dermatofito que penetra en la base de la uña y afecta su color y grosor. Sus principales causas son:
• Pie de atleta
• Calzado chico
• Lavado y secado deficiente
• Golpes
• Contaminación por andar descalzo
• Utensilios de pedicura contaminados
Los tratamientos deben aplicarse en todas las uñas para evitar el contagio de las sanas y los resultados son visibles al cabo de tres meses.
Verruga
Carnosidad que aparece aislada o en grupo por virus ubicados en la planta. Nunca debe cortarse pues podría empeorar, lo recomendable es acudir con un ortopedista o dermatólogo.
Estas condiciones afectan la movilidad y calidad de vida de muchas personas. Para prevenirlas:
• Jamás ignores el dolor pues es una señal de que algo los está lastimando
• Examínalos y dale seguimiento a cualquier detalle anormal como enrojecimiento, resequedad, comezón, etcétera
• Lávalos y sécalos en su totalidad. Asegúrate de erradicar toda la humedad entre los dedos y al finalizar rocía talco o desodorante en aerosol
• Mantén las uñas cortas para evitar que se entierren
• Selecciona los zapatos adecuados a tu talla y a la actividad que vayas a realizar
• Cambia de calcetines y calzado diario. Si sudas mucho o es temporada de calor, hazlo dos veces al día
• Evita caminar descalza en gimnasios, duchas comunes o cualquier lugar público
• Consiéntelos con un masaje o una sesión de pedicure
• Acude con un especialista ante cualquier síntoma y sé cautelosa al usar remedios caseros
Recuerda que para tener unos pies bellos primero deben estar sanos.