¡Ten calma! Esta conducta es normal ya que su ritmo de crecimiento es menor respecto al de su primer año, incluso, algunos presentan lo que se conoce como “manía por un alimento”, lo cual significa que sólo quieren comer una cosa.
Por lo general no dura mucho tiempo, así que no es perjudicial para su salud y si se trata de una alternativa benéfica, puedes dejar que tu hijo siga consumiéndola hasta que se le pase.
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Para que acepte otras opciones aquí una serie de sugerencias útiles:
- Ofrécele la opción nueva junto a alguna que ya conoce y le gusta. Dásela en una porción pequeña y pruébala delante de él para transmitirle confianza
- Inténtalo cuando tenga más apetito. Es decir al principio de cada comida; ten en cuenta que no debes presionarlo
- Cuida que su dieta sea equilibrada y variada. Si en casa observa diversidad de platos y en consecuencia de colores, sabores, aromas y texturas despertará su curiosidad y contribuirá a que su paladar se acostumbre a probar y comer de todo
- Hazle ver que estás segura de que le agradará. No muestres demasiadas expectativas, pues si lo prueba y no le satisface, podrías ver frustrados tus próximos intentos
- No desistas a la primera. Ante su negativa, continúa insistiendo en los próximos días, así se familiarizará y aceptará darle una oportunidad
- Trata de diferentes formas. Si tras degustarlo notas su descontento, espera un tiempo antes de volver a mostrárselo, pero efectúalo con una presentación y preparación distinta
- Intégralo en las cuestiones relacionadas con la nutrición del hogar. Invítalo a que te ayude en la cocina y se involucre en la preparación de sus platos. Asimismo, pídele ideas para el menú cotidiano
- Respeta su deseo por experimentar. Cuando vayan a comer fuera de casa, déjalo aventurarse a elegir lo que consumirá
- No involucres la dinámica de premios y castigos. De lo contrario podrías volverlo caprichoso y fomentar el hecho de que sólo quiera consumir lo que a él le gusta
- Propicia el ambiente ideal. Sentarse a la mesa en familia favorecerá el proceso. Además es importante que no haya distracciones como la televisión, celulares o tablets
La influencia parental
Tu pareja y tú tienen mucho que ver en el modo en que los niños se relacionan con los alimentos. El ejemplo vale más que las palabras y si ustedes son renuentes a nuevas alternativas o bien no llevan una dieta saludable, su hijo hará lo mismo por imitación.
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
Aunque es importante que se alimente bien, sé paciente y anímalo mas no lo fuerces o podría ver la hora de la comida como un momento desagradable.