- Deja de respirar por un lapso de entre 15 y 20 segundos
 - Se pone pálido, azul o color púrpura
 - Desciende su frecuencia respiratoria
 
Entonces puede padecer de apnea del sueño. La apnea es un trastorno del sueño que puede provocar ronquidos y momentos en los que el bebé deja de respirar por algunos segundos. Se ha detectado que los bebés prematuros tienden a presentar apnea con mucha mayor intensidad que los bebés de término. Aunque hay otros factores que también pueden provocar el padecimiento, como son:
- Una infección
 - Nivel bajo de azúcar en la sangre
 - Ataques o convulsiones
 - Temperatura alta o baja
 - Una herida cerebral
 - Cantidad insuficiente de oxígeno
 
Los bebés prematuros tienen apnea porque los centros de respiración de los bebés prematuros son inmaduros. Normalmente, los prematuros tienen una arrancada de respiración a fondo, seguida por períodos de respiración de poca profunda o con pausas. La apnea se presenta con mayor frecuencia cuando el bebé duerme. Conforme el bebé crezca y madure, la respiración se normalizará.
Por fortuna, la apnea no está relacionada con la tan temida y desconocida muerte de cuna o el Síndrome de Muerte Súbita Infantil (SMSI).
 
                
 
            
        