Un nuevo estudio ha puesto las alertas al encontrar una posible relación entre haber tenido COVID-19 y un mayor riesgo de aborto espontáneo, especialmente en las primeras semanas del embarazo. La investigación analizó casi 27 mil embarazos entre 2019 y 2023, y encontró que las personas que se contagiaron con el virus antes o durante el primer trimestre tenían hasta casi tres veces más posibilidades de vivir una pérdida gestacional antes de las 20 semanas.

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Cuál es la relación entre el COVID y pérdidas gestacionales

Los expertos explican que, cuando hay una infección por COVID-19, el cuerpo genera una respuesta inflamatoria que puede afectar el funcionamiento de la placenta. Además, la fiebre alta y otros síntomas propios del virus podrían interferir con el desarrollo inicial del bebé.

Pero este no es el único factor de riesgo. También se vieron tasas más altas de pérdidas gestacionales en mujeres mayores, con condiciones de salud previas o que enfrentan desigualdades en el acceso a la salud, como es el caso de comunidades afroamericanas y latinas.

Entonces, ¿debo preocuparme si tuve COVID y estoy embarazada? No necesariamente. El estudio no dice que todas las personas embarazadas que se contagiaron vayan a tener una pérdida. Lo que sí resalta es la importancia de los cuidados preventivos, como la vacunación y el seguimiento médico cercano.

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Y si te lo estás preguntando: no, las vacunas contra el COVID no aumentan el riesgo de pérdidas gestacionales. De hecho, estudios previos muestran que las tasas de pérdida en personas vacunadas son similares a las que había antes de la pandemia.

Si estás embarazada o planeas estarlo, mantener tu salud protegida sigue siendo la mejor forma de cuidar a tu bebé desde el inicio.