1. Despensa a la puerta
Entre cambiar los pañales, amamantar y dormitar a ratos, lo último que pasa por tu mente es qué meterle a la despensa. Imagínate que una persona se tome la molestia de enviar un paquete completo. Checa los supermercados que cuentan con este servicio
2. Vale por un aseo
Escoba, ¿qué es eso? Cualquiera que haya sido mamá sabrá que retomar la limpieza a fondo tardará un buen rato. ¿Qué tal suena alguien que se ofrezca a hacerlo o que pague el aseo y te recuerde lo impecable que tu casa se puede ver?
3. Comida para llevar
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
Desde que tu crío está en casa, sin duda su alimentación es la más importante pero recuerda que para estar fuerte para él, también necesitas cuidarte. Alguien que prepare tu platillo favorito o te envíe una cena para dos de tu restaurante de siempre, ¿no suena maravilloso? Prueba este smoothie posparto.
4. Masaje antiestrés
Hay algunos spas que incluso cuentan con la opción de servicio a domicilio y de ofrecer un masaje simultáneo para ti y tu bebé (si no es tan pequeño). Sólo revisa la salud de ambos y que los especialistas cuenten con certificación. También puedes aprender a hacerle masaje a tu bebé.
5. Free pass
Se trata de alguien que se ofrece a cuidarte al crío por una tarde o noche para cenar tranquila con tu pareja o tus amigas (aunque termines dormida mucho antes de lo que piensas). Este obsequio es exclusivo de personas de tu entera confianza como algún familiar o amiga cercana.
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6. Capricho urgente
Mamelucos y chupones nunca están de más pero recibir algo que sólo tú disfrutes te ayudará a sentirte más contenta y transmitirle ese estado de ánimo a tu hijo. Un libro de tu autor favorito, una crema relajante o incluso un paquete de tus chocolates preferidos te harán sonreír más que nunca.
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