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Frases que no debe decir una mamá

Recuerda que tu hijo aprenderá muchas cosas de ti y debes procurar que la mayoría sean cosas buenas.

cosas que una mama no debe decir
Ser mamá no sólo se resume al cuidado y crianza de los hijos. También tiene relación con cómo te vas a expresar desde el momento en que tu hijo nace, porque recuerda que te conviertes en su ejemplo a seguir y además él aprenderá todo de mamá y papá ¡hasta la peor palabra que puedan pronunciar!

Aunque tú digas estas frases con la mejor intención, puedes estar confundiendo a tu hijo e incluso afectando su desarrollo y hasta su autoestima.

Estas son frases que no debe decir una mamá: 

No hables con extraños: Aunque lo hagas con la intención de cuidar a tu hijo y que él aprenda que no debe acercarse a personas que no conoce, podrías estarle mostrando mucha inseguridad. No es lo mismo que le digas que debe informarte con quién habla pero que no tiene nada de malo hablar con personas que no conoce. Recuerda que lo importante es transmitir el mensaje correcto y dejar claras ciertas medidas de seguridad.

No pasa nada, estás bien: Si está llorando porque la rodilla le sangra, tu trabajo es ayudarlo a sobrellevar sus emociones y enfrentarse a ellas, más no ignorarlas. Además de atender la herida, dale un beso a tu hijo y muestra que entiendes lo que siente con algo como: `la caída estuvo muy fea pero con la venda te sentirás mejor´. 

Todo lo haces bien: Felicitarlo en exceso por cualquier cosa puede provocar que sus acciones dependan más de tu aprobación que de su propia confianza o motivación. En lugar de decirle que es un genio para todo: sé específica, recuerda que es muy importante comunicarse de forma correcta. Podrías decirle: «Qué increíble dibujo» o «Esa fue una linda forma de ayudar a tu amigo». 



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No te vayas a caer, ten mucho cuidado: Con esta frase no estás previniendo nada, decirle eso a tu hijo mientras se balancea en un columpio o corre, lo hace más propenso a caerse. Tu advertencia  hace que pierda la concentración y dude de sí mismo. Enséñale cómo hacer las cosas de forma segura y recuérdale siempre que los accidentes le ocurren a cualquier persona. Nunca dejes de motivarlo.

Estoy gorda: Toda mamá debe recordar que su nivel de autoestima lo notará su hijo e influirá en su crecimiento. Si lo que más oye de ti es que «parezco un cochinito», tu hijo de inmediato comenzará a formarse la idea de cómo debe ser un cuerpo «perfecto». De preferencia mejor procura decir «Necesito comer bien y hacer ejercicio para estar más sana» o «Saldré a correr porque el día es fabuloso» . 

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