En el lenguaje del amor todo suma: las palabras que dices, el tiempo que le das al otro, los obsequios (no tienen que ser costosos) e incluso, los abrazos y besos, todos ellos esenciales en la comunicación amorosa con los demás, especialmente, con tus hijos.
¿Qué son los lenguajes del amor?
Fue Gary Chapman, un teólogo, antropólogo y educador estadounidense con estudios de relaciones de pareja, quien propuso el término: lenguajes del amor, para describir los tipos de comunicación amorosa entre las personas.
Chapman se enfocó en la relación de los padres con sus niños, debido a la necesidad que tienen los adolescentes de sentirse amados y a la imposibilidad que sienten muchas veces los padres, de hacerles saber que los aman. Claro que este mismo lenguaje es usado entre parejas, amigos y padres e hijos de cualquier edad.
Al respecto, Cinthya Quesada Mejía, maestra de la Asociación Psicoanalítica Mexicana, precisa que “el amor tiene que ver con el deseo del reconocimiento del otro. Es decir, ser mirado y ser reconocido como un ser valioso, pues ello resulta indispensable para ser feliz. De ahí la importancia de tener un buen lenguaje de amor, tanto para darlo, como para recibirlo”.
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Tipos de lenguajes del amor
Gary Chapman propone 5 tipos de lenguaje del amor:
1. Palabras de afirmación: Poner palabras a los sentimientos no es fácil. Por ello, hay que decir lo bueno que uno ve en el otro. Ello brinda el reconocimiento que el otro anhela, necesita y sueña. ¡Dile siempre a tus seres amados cuánto los quieres, cuan importantes son en tu vida y dile a tu hijo que tu amor es infinito!
2. Tiempo de calidad: Pensemos en una mamá que va a arropar a su hijo y lo está preparando para dormir. Puede tener mucho tiempo o no, pero el mensaje que le da es el de querer estar con é La mamá puede o no tener tiempo, o estar estresada, pensando en el trabajo, o triste porque tuvo un problema con su pareja; ésa no es la cuestión. El lenguaje de amor se da cuando esa mamá tiene suficiente salud mental para dejar todas esas cuestiones a un lado y dedicarle unos minutos a ver que su hijo esté bien, esté limpio, tenga la pijama puesta, tenga buenas condiciones para dormir bien.
3. Regalos: Dar un regalo es una muestra de interés y de un deseo de halagar al otro, no se necesita brindar un obsequio costoso. ¿Es un regalo pensado en la utilidad que le dará tu ser amado, o simplemente es un regalo para verlo feliz? Dale una carta, un dulce, hornea un pastel. Hay muchas opciones.
4. Contacto físico: Es bastante claro que éste tiene que ver con tocar a esa persona a quien queremos demostrar cariño Sabías que desde recién nacidos, los seres humanos necesitamos el contacto físico. Incluso fisiológicamente el contacto físico tiene ventajas al reducir el estrés y el dolor. El contacto físico sirve mucho cuando uno está contento y quiere abrazar al otro a modo de festejo, pero también cuando está triste y se desea contener. ¡Así que apapacha sin miedo!
5. Actos de servicio: Cuidar al otro es un signo de amor. Lamentablemente para los varones, éste lenguaje es más utilizado por las mujeres que por los hombres: cuidar al bebé, atención de los enfermos de cualquier edad y el cuidado de los adultos mayores. En general, este lenguaje del amor significa estar ahí para el otro, procurando y haciendo todo lo que está en nuestras manos para que el otro se sienta bien.
¿Cómo saber a cuál tipo del lenguaje del amor perteneces?
Quesada Mejía, explica que los lenguajes de amor van de la mano con lo que se vive en familia y con cómo se experimenta el amor durante el desarrollo. Podríamos decir que el lenguaje es un estilo de proveer amor en una familia. Aunque también la sociedad va enseñando los tipos del lenguaje del amor.
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Así, “uno aprende —no sólo como lección, sino como vivencia— a decirle a alguien que lo ama a través de diferentes formas porque así le fue expresado el amor a él o ella”.
“Algunas familias están más acostumbradas a ciertos lenguajes. Además, las familias están insertas en sociedades y culturas que también hace que se tomen ciertos matices. Es por tanto que, en ocasiones, es difícil coincidir en lenguajes del amor con otras culturas, y ello nos pueden llevar a malentendidos. Sin embargo, todo se puede resolver cuando se trata del lenguaje del amor”, precisa Quesada Mejía.
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