Estos son los tipos de maltrato infantil más comunes:
Físicamente
Los mecanismos más habituales en el maltrato físico en menores son cuatro:
- Traumatismos: Cuando el menor es maltratado físicamente, generalmente recibe golpes con la mano, con el pie, es azotado contra la pared o el suelo, con el cinturón o cualquier otro objeto que tenga a la mano el agresor a la hora de perder el control emocional. El niño también puede ser mordido o agredido con un objeto punzo-cortante. Las partes del cuerpo más lesionadas suelen ser la cabeza, cara y cuello, brazos, piernas, tronco y abdomen. Los golpes en la cabeza pueden provocar una hemorragia intracraneana y causar una lesión en el sistema nervioso central (SNC) de gravedad variable. En casos extremos, los traumatismos pueden provocarle la muerte.
- Quemaduras: Suelen ser quemados con cigarros, cerillos, objetos o alimentos calientes (plancha, horno, parrilla), originándose lesiones de extensión y profundidad variables. Estas lesiones dejan cicatrices permanentes en el cuerpo del niño.
- Asfixia: Éste es el tipo de maltrato físico más difícil de diagnosticar, pero se toma en consideración sobre todo cuando se tiene evidencia de posible agresión y cuando se trata de lactantes.
- Ahogamiento: Si un menor muere por ahogamiento es obligatorio realizar una autopsia par descartar que la causa de tal suceso haya sido intencional.
Sexualmente
Desde el punto de vista médico, un menor puede ser víctima de: incesto, violación, fomento a la prostitución y manipulación de los genitales. Otras formas que se consideran son: la pornografía infantil y la corrupción de menores, entre otras.
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Para diagnosticar el abuso sexual se toman en cuenta la presencia de lesiones (como desgarres) en el área genital y anal. Asimismo, son síntomas de abuso la aparición brusca de cambios emocionales o en la personalidad del menor, la existencia de embarazo o un padecimiento infectocontagioso (como una enfermedad de transmisión sexual) no esperado para la edad del menor.
Emocional y socialmente
Esta es, probablemente, la forma más común de maltrato infantil, pero también una de las más difíciles de diagnosticar, y puede expresarse tomando en cuenta los siguientes hechos:
- Negligencia nutricional
- Drogadicción o intoxicación
- Falta de atención médica o dental
- Abandono
- Falta de higiene
Otras formas de maltrato
Una forma de maltrato poco usual pero muy grave es la del Síndrome de Munchousen por poderes (SMPP). Ocurre cuando uno de los padres, habitualmente la madre, inventa o provoca una enfermedad en su hijo, causando estudios médicos, tratamientos y hospitalizaciones innecesarias. Uno de los síntomas que se observan con más frecuencia son las crisis convulsivas, por lo que estos niños son diagnosticados erróneamente como epilépticos.
Algunas de las señales de alarma por la que se puede sospechar de este tipo de maltrato son:
- Enfermedad inexplicable y prolongada
- Síntomas o signos incongruentes o que sólo aparecen cuando está presente la mamá
- Tratamientos ineficaces
- Niños a los que se le atribuye alergias alimenticias o farmacológicas
- Mamá que no están preocupadas por la enfermedad del niño, pero que están constantemente en el hospital y que incluso se muestran colaboradoras con los médicos y enfermeras, creando relaciones muy estrechas con el personal sanitario
- Familias en las que han ocurrido muertes infantiles inexplicables
¿A quién acudir?
Centro de Prevención y Atención al Maltrato y la Familia
Lunes a Viernes de 9:00 a 18:00 hrs.
En los Sistemas Municipales DIF (Centro de Prevención y Atención al Maltrato y la Familia) Lunes a Viernes de 9:00 a 16:00 hrs.
Teléfonos: (01722) 2173900 Extensiones 222, 211, 360 y 140
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