El diario Milenio compartía que en México, y según Sergio Abraham Covarrubias y Juan José Peña Cabriales, investigadores del Departamento de Biotecnología y Bioquímica del IPN, los metales contaminantes más importantes son el mercurio, el arsénico, el plomo y el cromo, debido a su abundancia y toxicidad.
Metales tóxicos en comida para bebés
Seguramente se preguntarán cómo es que los metales tóxicos llegaron a la comida para bebés y es que en realidad, es a la comida de todas las personas.
Y es que, si bien son metales pesados que se encuentran en la corteza terrestre, también se pueden dispersar cuando se liberan metales con las erupciones volcánicas.
Sin embargo, esto no es nuevo, hace un par de años, CNN compartió un estudio muy detallado de cómo algunos alimentos estaban contaminados con plomo y arsénico.
Además, el mismo reporte de CNN da detalles de que el arsénico se encontró en el 68% de los alimentos para bebés comprados en tiendas.
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El mercurio estaba en el 7% de los alimentos para bebés comprados y en el 10% de los alimentos familiares. (Los niveles más altos de mercurio se encuentran en los mariscos, que no fueron contemplados en este análisis).
Por eso, la HBBF, una alianza sin fines de lucro, científicos y donantes, está en una misión para reducir la exposición de los bebés a estas sustancias químicas dañinas.
Analizaron 288 alimentos de tiendas en todo Estados Unidos y encontraron plomo en el 90% de los alimentos infantiles manufacturados y en el 80% de los alimentos familiares comprados en tiendas y purés caseros. Según la Academia Estadounidense de Pediatría
La exposición a metales tóxicos puede ser perjudicial para el cerebro en desarrollo. Se ha relacionado con problemas de aprendizaje, cognición y comportamiento
El problema con el arroz
Recientes publicaciones de El País explican que científicos del Instituto Nacional de Salud Púbica de la Universidad Iberoamericana realizaron el primer monitoreo en México sobre la presencia de plomo en 103 alimentos, bebidas y especias más consumidos en el país y descubrieron partículas de este metal pesado en 18% de los productos analizados.
La investigación realizada de la mano de la ONG Pure Earth destaca la indefensión de los consumidores, debido a que muchos de los alimentos analizados forman parte de la canasta básica.
Y, lo más grave, es que hasta 800 millones de niños a nivel mundial tienen niveles de plomo en la sangre iguales o superiores a 5 μg/dL, un valor que representa un riesgo para la salud, de acuerdo a un informe elaborado por la Unicef y Pure Earth.
Más del 17% de los niños entre 1 y 4 años en México tienen estos niveles de plomo en sangre, según la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición, publicada en 2018.
La cifra supera con creces los registros de Estados Unidos, donde solo el 2% del mismo grupo de edad padece esta intoxicación.
El límite de plomo permitido es de 0.20mg por kilo, esto según información de la FAO y la OMS.
Y todo tiene sentido cuando se leen los resultados que compartió CNN en su informe de 2022, donde se explica que los alimentos más contaminados que consumen los bebés son todos a base de arroz.
«Las tortas de arroz, los cereales de arroz crujiente y el arroz integral sin agua de cocción están muy contaminados con arsénico inorgánico, que es la forma más tóxica de arsénico»
El arroz integral y el silvestre son los más perjudiciales, ya que el salvado contiene las mayores concentraciones de arsénico.
Investigaciones anteriores demostraron que incluso niveles bajos de exposición al arsénico inorgánico pueden afectar al desarrollo neurológico del bebé.
Un metaanálisis de estudios sobre el tema descubrió que un aumento del 50% en los niveles de arsénico en la orina se asociaría con una disminución de 0,4 puntos en el coeficiente intelectual de los niños de entre 5 y 15 años.