Es muy importante entender que el rol que desempeña la pareja no es fácil, ya que los vínculos con los hijos no son simples pues suelen interponerse la rivalidad del progenitor, los celos, la carencia de modelos a seguir, la fantasía de sentir por el niño un amor instantáneo y correspondido, o la culpabilidad por no experimentarlo.
Además, la relación está compuesta por la integración a un grupo familiar constituido, afirmado y poseedor de una historia propia, con esperanzas y temores (del que con frecuencia se aísla a la nueva pareja); otro, por el sentimiento dividido del hijo entre el deseo de querer y hacerse querer por ésta, y la lealtad hacia el progenitor “abandonado”.
Encontrar un espacio para el afecto y el respeto mutuo entre estas contradicciones requiere paciencia, calma, acuerdos, renegociaciones, comunicación eficaz, respeto, estrategias adecuadas y sobre todo, información sobre los conflictos de la familia, los problemas habituales y las soluciones posibles.
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En el caso de quienes ocupan el lugar de la pareja del padre, abordan a la familia con la imagen idealizada de que se harán querer por sus hijos, que se los ganarán mediante el afecto, y que podrán depositar en ellos su maternidad. En ocasiones esto es posible, dependiendo de factores personales, del entorno familiar, y de cómo fue resolvió la separación anterior.
Sin embargo, cabe señalar que se trata de un vínculo forzado no elegido. Ser la pareja de papá pero no madre puede provocar insatisfacción y celos. De igual manera cuando se es la pareja de mamá y no padre.
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
Recuerda que lleva tiempo penetrar en un grupo formado y forzar la entrada puede ser contraproducente, al igual que si se encierran en una esfera de resentimiento. Lo más recomendable es tener paciencia y mucha comunicación con ambas partes.
Sugerencias
- Muestra el afecto que tienes por tu nueva pareja y que muestre el que siente por ti delante de ellos. Esto ayuda a que el niño perciba cuál es su lugar en la casa y en la vida del padre o madre. Están prohibidos los exhibicionismos
- Trata de que conozca y respete las características esenciales de cada uno de los miembros de tu familia, ya que no pueden ser completamente modificadas
- Elabora con tu nueva pareja una lista de normas, límites, tareas escolares y domésticas, salidas, vacaciones, etcétera
- Sean flexibles, recuerden que es sinónimo de alegría y madurez. Toma tu tiempo para ir fortaleciendo las nuevas relaciones y comunicación tanto con tu hijo como con tu pareja
- Recuerda que en los inicios de la nueva formación familiar todos los integrantes del grupo se sienten extraños y desconcertados. Trata de no personalizar los conflictos y mucho menos de sentirte fracasadoSi eres la nueva pareja, construye con tiempo y delicadeza un vínculo único y propio con sus hijos
- Ten presente que el cariño también se puede desarrollar entre adultos y niños, siempre y cuando no se fuercen
- Como la nueva pareja, acepta que se conserve una buena relación de co-parentalidad con el otro progenitor, y ayuda para que suceda
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Agradecemos la colaboración de la psicóloga Ana María Balboa para la elaboración de este artículo, puedes consultarla al T. 5754 5211 y 5586 9920.