Los nuevos sabores y texturas pueden provocar desajustes en su sistema digestivo y causar inflamación, gases y diarrea. Por eso es importante que a partir de los 5 meses vayas preparando a su cuerpo para ese cambio.
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Desde los 6 meses es importante que integres a su dieta los probióticos, que son bacterias buenas que fortalecen la flora intestinal, favorecen el proceso de digestión, la absorción de nutrientes, y el fortalecimiento del sistema inmunológico.
Recuerda que tu bebé nace sin ninguna bacteria de este tipo, y es hasta el momento del parto cuando empieza a llenarse de ellas, (después las recibe a través de la lactancia). Pero cuando le das nuevos alimentos necesitas proteger su flora intestinal sana para evitar enfermedades y eso se logra con los probióticos. ¿Cómo puedes preparar a tu bebé para este cambio?
Ingredientes naturales: es importante que sus primeras papillas sean de frutas y verduras naturales; sin azúcar o sal adicionada. Dale primero una onza y ve aumentando la cantidad hasta llegar a dos. Ten en cuenta que es hasta los ocho meses cuando puedes incorporar carne a sus papillas.
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El mismo alimento por algunos días: para que se vaya acostumbrando a los nuevos sabores (y su cuerpo a esos nuevos alimentos) asegúrate de darle la misma cantidad y el mismo sabor durante máximo tres días seguidos, esto ayudará al organismo de tu bebé a adecuarse al nuevo reto de digestión.
Líquidos: en cada comida dale una o dos cucharadas de agua o té, esto ayudará a su proceso digestivo.
Dale probióticos: no es tan difícil como parece, una buena alternativa es Vivera®, que aporta la cantidad suficiente de probióticos llamados L. Rhamnosus GG que tu bebé necesita para proteger y restablecer su flora intestinal. Son sobrecitos que se diluyen fácilmente, así que podrás dárselo en el agua o con la papilla.
Pon mucha atención a los cambios que pueda presentar durante la ablactación, si notas que algún alimento le causa alteraciones en la respiración o coloración de la piel, es importante que consultes a su pediatra porque puede que algún alimento le cause alergias o de intolerancia.