Jugar también fomenta su autoestima y la relación interfamiliar.
Cuida que su uso no esté ligado al hecho de que aveces no los quieres cuidar.
Lo mejor de esta época es darles algo que los estimule y que además tú puedas disfrutar con ellos.
Que la espera de tu hijo por la llegada de estos tres personajes no sea motivo de angustia.
Decora la habitación de tu hijo con colores que estimulen sus sentidos.