El 90% del cuerpo está constituido por bacterias que se encargan de proteger la salud de tu hijo, a esas bacterias buenas se les llama microbiota o flora intestinal.
Tu bebé nace sin ninguna bacteria de este tipo y no es sino hasta el momento del parto cuando empieza a llenarse de ellas. La mejor manera de mantener una flora intestinal sana es dándole probióticos, Lactobacillus rhamnosus GG, microorganismos vivos buenos que fortalecen y restauran el sistema inmune y la flora intestinal de manera natural, rápida y segura.
¿Cómo protegen los probióticos a un bebé?
Previenen enfermedades: el intestino es considerado como el órgano inmune más extenso del cuerpo humano, en la mucosa intestinal se encuentran aproximadamente el 90% de los microorganismos que defienden de enfermedades a tu bebé mejorando su sistema inmune.
Mejoran la digestión: producen sustancias fundamentales para el proceso digestivo y ayudan a los movimientos en el intestino, eso hace que la digestión mejore.
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Previene la diarrea: las bacterias buenas que viven en la flora intestinal crean una capa protectora, evitando que las bacterias malas que causan diarrea entren.
Reducen el riesgo de padecer alergias: un bebé hasta los 12 meses está expuesto a más de mil virus cada día que pueden provocar alergias, gracias a las bacterias buenas de la flora intestinal, el cuerpo puede defenderse de microorganismos a través de una barrera natural.
Mejoran la absorción de vitaminas y nutrientes: estas bacterias buenas mejoran la salud de la flora intestinal,que a su vez ayuda a que tu bebé realmente obtenga todos los nutrientes de la comida que le das. Además, ayudan a la producción de vitaminas en el cuerpo.
La mejor manera de darle a tu bebé probióticos es a través de algunos alimentos, otra opción es integrar sobres de probióticos a la comida, papilla, o bebidas de tu hijo.