fbpx

Niños que se muerden las uñas

Si tu hijo comienza a hacerlo, debes tomar ciertas medidas de inmediato.

Que los niños se muerdan las uñas es un un mal hábito conocido como onicofagia, que seguramente preocupa a muchas familias y muchos se preguntan ¿por qué los niños se muerden las uñas?

De acuerdo con varias investigaciones en el mundo, esto es una consecuencia del mal hábito de chuparse el dedo en la infancia,  ya que después comienzan a llevarse el dedo o los dedos a la boca cuando se encuentran en alguna situación de estrés, conflicto o que genera una carga emocional de la cual no se tiene control.

Te interesa: Chupón o dedo, ¿qué afecta más a sus dientes?

De hecho está asociado al trastorno obsesivo-compulsivo o al trastorno dismórfico corporal, que tiene que ver con las obsesiones y pensamientos preocupantes que surgen de forma repetitiva en la conciencia de una persona.

Según estadísticas, el 30% de los niños entre 7 y 10 años de edad, el 45% de los adolescentes, el 25% de los adultos jóvenes y el 5% de los adultos mayores se muerden las uñas. 

Te interesa: Los niños y el estrés



Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.

De acuerdo con  la Academia Americana de Dermatología (AAD), las infecciones bacterianas por morderse las uñas son muchas y de hecho la mayoría de los casos de E. coli y Salmonella se deben a esto. Además, se puede desarrollar una infección en la piel alrededor de la uña conocida como paroniquia, que daña el pliegue ungueal y causa inflamación y destrucción de la cutícula.

¿Qué hacer para que no se muerda las uñas? 

Seguramente muchas mamás quieren que esta maña desaparezca de inmediato, pero la realidad es que los niños que se muerden las uñas deben recibir atención adecuada en vez de regaños. Toma en cuenta estos tres tips y en caso de no notar cambios, acude con un especialista para evitar daños cuando sea adulto.

  • No lo regañes. Debes preguntar qué siente o qué lleva a morderse las uñas o a tener el dedo en la boca.
  • Debes poner especial atención en su comportamiento y en cuanto veas que tu hijo está ansioso, poder corregirlo de la manera adecuada o incitarlo a hacer algo que lo distraiga y así evitar que el dedo termine en su boca.
  • Cuéntale respecto a las enfermedades, consecuencias y los daños que podrá tener en sus dedos si sigue haciéndolo. Procura no ser alarmante ni hacerlo a modo de amenaza, para que no se sienta más ansioso.

Comparte esta nota

Más sobre este tema

Qué te pareció esta nota

0 / 5. 0

TAGS: