Buenas noches Dra. Nancy,
Mi nombre es Malena y soy mamá de un hermoso niño de 4 años 9 meses.
Estoy muy preocupada porque, a pesar de que es un niño muy inteligente, no me avisa para ir al baño; a veces se hace pipí o popó tanto en casa como en el colegio. Ya he intentado muchas formas de poder animarlo a avisar pero nada me ha funcionado; no va al baño con tal de no dejar el juego. Sí lo he castigado y le he dado nalgadas cuando se ensucia. La verdad estoy desesperada, he pensado consultar a un psicólogo porque pienso que puede ser algo emocional.
Por favor ayúdeme.
Gracias
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
Es uno de los temas que más preocupa a las mamás. Comenzaré por decirles que, en muchas ocasiones, las mamás comienzan a preocuparse antes de tiempo; si bien la mayoría de los niños logran permanecer secos durante la noche a los 3 años, el mojarse en la cama no se considera un problema sino hasta después de los 5 años de edad.
Además, los “accidentes” no cuentan. En otras palabras, si un niño logra permanecer seco durante la noche la mayor parte del tiempo y una noche “le gana,” no podemos hablar de la presencia de un problema.
Para que se considere que un niño presenta enuresis (éste es el término médico para el trastorno), debe orinarse de manera persistente al menos 2 veces por semana durante 3 meses consecutivos y tener más de 5 años de edad.
Existen diversos tipos de enuresis:
- Diurna: si el problema se presenta durante el día
- Nocturna: si se presenta por la noche
- Mixta: tanto en el día como en la noche
- Primaria: cuando el niño tiene más de 5 años y nunca ha adquirido el control de la vejiga
- Secundaria: cuando logra el control de la vejiga durante algún tiempo y después lo pierde
- La enuresis es más frecuente en los niños (varones) que en las niñas; suele darse en familias donde con frecuencia, el padre del niño también presentó el problema y tiende a desaparecer en la adolescencia
La próxima semana continuaremos hablando de este tema. Hasta entonces recuerda:
Llena su vida de tanto y tanto amor que no quede espacio ni para un solo castigo.
¡Hasta la próxima!