¿Qué es la depresión masculina?
¿Alguna vez has pensado que tu pareja también puede sufrir de depresión posparto? Diversos estudios revelan que en el hombre influyen más los factores sociales o psicológicos para desarrollar esta etapa de marcados cambios emocionales; también se sabe que durante el embarazo disminuyen los niveles de testosterona, lo que quizás sirve para encausar al papá a vincularse con su hijo y para disminuir la agresividad masculina.
La Universidad de Oxford estudió a 26 mil parejas durante ocho semanas, de las cuales el 4% de los hombres desarrolló este tipo de cuadro.
Los recién nacidos también pueden sufrir de depresión, según Paul Ramchandani, psiquiatra de Oxford, cuando el papá la padece se observa sólo en el hombre problemas de conducta, si la depresión la padece la madre los niños de ambos sexos pueden presentar problemas emocionales y de conducta.
Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.
Quiero ser parte de la familia
Después de que los bebés nacen, los papás se pueden sentir desplazados y poco útiles en la familia. Como mamá, tú compartes más momentos de intimidad con tus hijos como la lactancia que refuerza los lazos entre ambos, y los papás pueden cambiar el pañal, bañar o dormir a los hijos, aunque los momentos puedan ser más breves por factores como el trabajo.
Además, el ritmo sexual disminuye y eso puede frustrar a los papás, ya que las mujeres se dedican de lleno al bebé. Por cuestiones culturales y educativas, al hombre le cuesta más trabajo expresar lo que siente, y en ocasiones lo que lo aqueja o pone al borde de su paciencia no lo expresa tan fácilmente.
Al llegar un bebé, tu pareja puede sentirse abrumado por presiones económicas o porque siente que ya no es parte de tu entorno, por lo que es necesario que no dejes que los lazos de amor se rompan y lo hagas parte de este momento maravilloso.
Si no estuvo muy conectado a ti durante el embarazo, dile que necesitas que se integre durante el posparto en momentos clave como dormir al bebé, la lactancia, cargarlo o verlo dormir; recuerda que a ellos les cuesta más decir lo que sienten y es necesario que los motives para que sientan plena confianza.
La depresión masculina es real
En una investigación publicada en mayo de 2014 en la edición del Journal of the American Medical Association, el autor principal del estudio James Paulson, profesor asociado y psicólogo clínico en la Escuela de Medicina de Virginia Oriental, en Norfolk explica que “la depresión pre y posparto en el hombre es algo real. En nuestro análisis, la tasa global de depresión en los padres fue de 10.4%, aproximadamente el doble de lo que cabría esperar en la población general de los hombres».
Paulson y la coautora del estudio Sharnail Bazemore analizaron los datos de 43 estudios en los que participaron más de 28 mil hombres, en general el 10.4% experimentaron depresión posparto.
Otro dato importante es que 25% experimentó cuadros de tristeza entre el tercer y sexto mes de vida del bebé, lo que representa una tasa más alta, que por mucho se veía influenciada si la mamá experimentaba este cuadro psicológico.
Señales de alarma
Los científicos que realizaron este estudio identifican los siguientes signos en los papás:
- Tristeza constante
- Pérdida de interés en actividades que antes se disfrutaban
- Fatiga
- Somnolencia
- Pérdida del apetito
- Sentimientos de desesperanza e irritabilidad
Ante este cuadro es necesario que estos síntomas no se pasen por alto, confundiéndolos con instantes sin importancia o que no deben ser atendidos por un especialista.
¿Cómo ayudar ante la depresión masculina?
El Instituto Nacional de Psiquiatría Juan Ramón de la Fuente brinda las siguientes recomendaciones para ayudarte si sientes que estás pasando por un período de depresión posparto como papá:
- Practica ejercicio de forma moderada, ve al cine, participa en actividades sociales, religiosas o en las que interactúes con los demás y te sientas bien.
- Identifica los síntomas de depresión posparto, asúmelos y establece metas realistas para superar esta etapa temporal de cambios e incertidumbres.
- Divide las tareas grandes en varias pequeñas, establecer prioridades y hacerlas posibles en la medida que tu persona lo provoque, te dará tranquilidad.
- No te aísles. Convivir con otras personas como tu pareja, padres, hermanos o amigos y tener alguien en quien confiar es mejor que estar solo y guardar secretos.
- Encuentra lo que te haga sentir mejor y disfrútalo, cada instante es valioso.
- No te desesperes, tu estado de ánimo cambiará de manera gradual, no inmediatamente.
- Durante el tratamiento, el sueño y el apetito mejoran antes que el buen humor. Disfruta cada avance y atesóralo.
- Comparte tus logros con los demás y date tiempo de celebrarlos con las personas que amas.
- Ama a tus hijos, no te pierdas las oportunidades para crear lazos con ellos. Desde que nacen, los bebés quedan marcados por instantes.