fbpx

¿Por qué y cómo enseñarle buena autoestima a tu hijo?

En ocho pasos una experta en psicología te explica cómo enseñarle a tener buena autoestima a tus críos y por qué debes hacerlo.

La autoestima, si la pudiéramos ejemplificar sería como una fuente de energía que provoca que si me siento bien conmigo mismo puedo tener la oportunidad de enfrentar la vida con dignidad, fortaleza, amor y realidad. ¿Pero cómo se la podemos inculcar a nuestros hijos si nosotros a veces no la tenemos?

La importancia de enseñarle buena autoestima

Cuando no tenemos autoestima, entonces nos sentimos limitados, nuestra energía se vuelve difusa y fragmentada. Si uno no se agrada, enfrenta la vida desde una postura de temor e impotencia; creas un estado en el que te sientes víctima y actúas en consecuencia.

Una persona que no se valora a sí misma, que no tiene autoestima, espera que su valor venga de alguien más – el esposo, la hija, el hijo – por lo que se dan situaciones de manipulaciones que afectan a las dos partes.

Saber que soy único y diferente a los demás, pero que también comparto con los demás seres humanos algunas características; es de gran importancia para el desarrollo de la autoestima.

Cada individuo es único y por lo mismo debemos de saber que cada niño es especial y por lo mismo no debe crecer a la sombra de la imagen de sus padres, ni viceversa. Si respetamos todas las partes de la personalidad y tenemos la libertad de aceptar estas partes, ponemos los cimientos para edificar la autoestima.

Somos únicos, esa es una realidad y todos tenemos partes positivas, que nos agradan e igualmente tenemos partes que nos desagradan; pero precisamente esto es lo que nos hace especiales. Si nos lo grabamos iremos aprendiendo más sobre nosotros como padres y seres humanos; por lo que también aprenderemos sobre nuestros hijos.



Libro 90 respuestas claras para mamás novatas.

Esto va relacionado con la forma en que los criamos; ¿cuántos de nosotros no comparamos a un hijo con otro?; ¿en cuántas situaciones no los obligas a hacer cosas que no quieren?; ¿cuántas veces no les enseñamos a conformarse con lo impuesto y no apreciamos lo magnífico que es que nuestro hijo sea único y especial?

Conoce: Lo que nadie te dice al criar a una niña

¿Dónde nace la autoestima?

Nace con el conocimiento de la exclusividad y respeto. Para alimentar la autoestima de tu hijo, pero también la tuya. Partiendo del principio de que sólo si reconoces tu personalidad única, podrás enseñarle a tus hijos. Te dejamos estos ejercicios:

-Acepta que cada ser humano, incluido tú y tu hijo, son diferentes y únicos, por lo que no debes compararte, ni caer en la tentación de comparar a tu hijo.

-Reconoce sus cambios y tus cambios. Definitivamente ya no eres la misma persona que cuando tenías 15 años, igual tu hijo, no es el mismo de cuando era un bebé. Podrían reunirse una vez a la semana y platicar qué cosas nuevas les han ocurrido últimamente. Desde algo físico, como algo emocional.

-Hablen de sus sentimientos, pero sin criticar, ni juzgar. Compartan lo que sienten uno por el otro, manifestando lo especial que es uno, por ser quien es.

-No etiquetes a tu hijo, recuerda el principio del cambio: nadie es estático, todos podemos cambiar, todos podemos crecer. Nadie es mejor o peor, somos iguales, pero diferentes.

-Apoya a tus hijos para que pregunten, para que cuestionen, para que así pueda verificar la verdad de las cosas; por ejemplo, si te tiene confianza, podrá hablar de lo que auténticamente se cuestiona o le preocupa, porque existe este clima de confianza.

-La autoestima se fomenta con la aceptación total y sincera de ustedes y de su hijo: “Acepto que somos semejantes, pero también que somos diferentes”.

-Estimula el interés de tu hijo a diferentes actividades, dale opciones y orienta con paciencia, para que adquiera seguridad.

-Respeta su forma de ser. No lo obligues a hacer o decir cosas que no desea: “saluda a tu tía”, “comparte con tu amiguito” (aunque sea su juguete favorito).

Ustedes como padres también enseñan la autoestima por la forma en que presentan la disciplina. Cuando le dan autoestima y respeto, el niño responde mejor. Por ejemplo, si criticas y ensalzas las conductas que te molestan de tu hijo, seguramente te responderá con agresión o enojo, ya sea activo o pasivo; en cambio, si le explicas y tratas de centrarte en lo que te gusta de tu hijo el conflicto desaparecerá y verás como acepta mejor las reglas de la casa.

Recuerda que un niño amado y valorado, aprenderá con mayor facilidad las nuevas conductas. Como padre y madre, eres su iniciador y maestro en el arte de la autoestima, sólo podrás enseñársela, si tú también la posees. 

También lee:
→El amor propio: el regalo de amor más importante para tus hijos
→¿Tienes un amor tóxico con tus hijos?
→El corto animado que busca explicar el amor gay en la infancia

Comparte esta nota

Más sobre este tema

Qué te pareció esta nota

0 / 5. 0

TAGS: